¿Te vas de vacaciones con tus hijos en avión? Los bebés y niños pueden tener una reacción severa a las sensaciones asociadas con el vuelo. En el blog de hoy, te explicamos cómo puede afectar el vuelo a sus oídos, y las recomendaciones a seguir.

¿Cómo afecta el vuelo a los oídos de los niños?

Los bebés y niños pueden tener una reacción severa ante las sensaciones asociadas con el vuelo. En numerosas ocasiones, la acumulación de presión puede ser demasiado molesta para sus oídos. 

El motivo son sus trompas de Eustaquio, es decir, los diminutos tubos que conectan el oído medio con la garganta, que son más cortas, estrechas y más horizontales que las de un adulto. Esto hace más difícil la regulación de presión en sus oídos y puede llegar a ser muy doloroso.

¿Qué es exactamente la disfunción de las trompas de Eustaquio?

La disfunción de las trompas de Eustaquio es una afección común que se produce cuando éstas se bloquean. Estas trompas son las responsables de que la presión se distribuya por igual entre el oído externo y el medio. También drenan el líquido del oído medio para garantizar que los conductos estén despejados y libres de obstrucciones. Suelen estar cerrados, sin embargo, se abren al masticar, tragar o bostezar.

Estos conductos son muy pequeños y pueden obstruirse fácilmente por diversas razones. Esto puede causar dolor, dificultades auditivas y una sensación de plenitud en los oídos que se denomina ETD. Esta afección es más común en los niños de 5 años o menos, ya que sus trompas de Eustaquio son más cortas puesto que no han alcanzado las características del oído adulto, lo que significa que puede ser más difícil regular la acumulación de presión en sus oídos.

El momento en el que la presión se acumula en los oídos es muy desagradable. Una sensación que todos hemos experimentado en algún momento, especialmente en el despegue y el aterrizaje de un avión. Si no se puede igualar la diferencia de presión en el oído medio debido a la ETD, puede llegar a ser bastante doloroso.

¡Por eso los bebés lloran tanto en los aviones!

Recomendaciones para seguir en el vuelo

  1. A los bebés, los viajeros más pequeños, recomendamos darles un biberón o un chupete en el aterrizaje y el despegue. La sensación de succión ayuda a abrir las trompas de Eustaquio para evitar cualquier bloqueo doloroso y puede ofrecer un gran alivio.
  2. Al resto de los niños y personas mayores recomendamos chupar un caramelo, bostezar o masticar un chicle y así ayudar a regular el oído medio en los momentos en que aumenta la presión de la cabina.
  3. Comer o beber. De esta forma evitaremos que se taponen los oídos por el cambio de presión y para los más pequeños puede tener un efecto tranquilizador.
  4. Hay otras alternativas como el uso de aerosoles nasales descongestionantes, antihistamínicos y descongestionantes orales, así como con tapones para los oídos. Eso sí, esos aspectos se deben consultar con un profesional médico.

¿Estás listo para tu próximo viaje en avión? ¡Recuerda tener en cuenta estas recomendaciones si viajas con niños! Te aconsejamos que hagas una revisión auditiva, de manera periódica para tener el control de tu salud auditiva y garantizar tu bienestar. Te esperamos en nuestro centro auditivo en Pontevedra. ¡Pide cita!